Los distintos mitos y la desinformación que existen acerca de los shampoos sólidos han hecho que la gente se resista a probarlos o no confíe en su efectividad. ¡No te dejes engañar! Aquí te compartimos algunos de los mitos más comunes y su realidad.
Mito 1: Los shampoos sólidos no generan espuma.
Realidad: Los shampoos sólidos sí generan espuma, y mucha. La cantidad de espuma depende de la fórmula y de los ingredientes con los que fueron creados. Muchos shampoos sólidos utilizan ingredientes naturales que permiten formar espuma sin recurrir a sulfatos agresivos.
Mito 2: Los shampoos sólidos dañan más el cabello.
Realidad: Los shampoos sólidos son más suaves porque no contienen ingredientes tóxicos en comparación con los shampoos líquidos convencionales. Estos últimos suelen contener sulfatos fuertes que pueden resecar o irritar el cuero cabelludo. Los sólidos, en cambio, evitan estos ingredientes y se enfocan en agentes limpiadores y humectantes más suaves, como aceites vegetales y mantecas, que ayudan a nutrir y mantener el cabello saludable.
Mito 3: Los shampoos sólidos duran menos tiempo que los líquidos.
Realidad: Cuando se usan y almacenan correctamente, los shampoos sólidos pueden durar más tiempo que los líquidos convencionales. La mayoría de los shampoos líquidos contienen entre un 80% y 90% de agua, mientras que los sólidos son concentrados. Para alargar la duración del shampoo sólido, evita dejarlo en contacto con el agua entre usos, lo que permite que dure más y se mantenga en buen estado.
Mito 4: Los shampoos sólidos no hidratan igual que los líquidos.
Realidad: Gracias a los ingredientes naturales de la mayoría de los shampoos sólidos, estos pueden nutrir, fortalecer e hidratar el cabello. Los sólidos están formulados para ser efectivos en distintos tipos de cabello y pueden ayudar tanto a cabellos grasos como secos. Además, al no contener sulfatos agresivos, no eliminan los aceites naturales del cabello, lo que ayuda a conservar la hidratación.
Mito 5: El shampoo sólido dura menos tiempo.
Realidad: Los shampoos sólidos son altamente concentrados y contienen menos agua que los líquidos convencionales. Cada vez que los usas, aplicas una cantidad que actúa de manera más efectiva en la eliminación de suciedad y grasa, con menos producto. Con el cuidado necesario, los shampoos sólidos pueden durar entre 60 y 80 lavadas, dependiendo de la longitud y tipo de cabello. En muchos casos, esto equivale a 2 o 3 botellas de shampoo líquido convencional.
Mito 6: Los shampoos sólidos son una moda temporal.
Realidad: Los shampoos sólidos son parte de un movimiento enfocado en el cuidado del medio ambiente y se han convertido en una alternativa cada vez más popular por sus beneficios ecológicos, como la reducción de envases plásticos. Aunque el interés actual puede parecer una tendencia, su enfoque en la sostenibilidad y en fórmulas naturales eficaces sugiere que seguirán siendo una opción estable en el mercado del cuidado personal.
